El vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo de Madrid, el cardenal Carlos Osoro, ha reivindicado la reconciliación y el diálogo como punto de partida sobre el que se debe reconstruir la sociedad española tras la emergencia sanitaria de la COVID-19.
«Dejemos de tener adjetivos. Lo importante son los sustantivos y los sustantivos son dos: hijos de Dios y hermanos de todos los hombres. Tenemos que luchar y trabajar por eso. Tenemos una oportunidad grande, sobre todo los que tenemos más responsabilidad», ha manifestado ante periodistas tras su segunda reunión de la semana con el Papa en el Palacio Apostólico del Vaticano, en la que también estaban presentes el presidente de la Conferencia Episcopal Española, el de Barcelona, cardenal Juan José Omella, y el secretario general, Luis Argüello.
Se trata de una cita habitual en el protocolo del Vaticano para conocer a los nuevos dirigentes del episcopado español poco tiempo después de su elección, que estuvo precedida por otra reunión el pasado jueves de corte más informal.
Osoro también ha incidido en el talante de hombre resolutivo del Santo Padre: «Venimos de hablar con un hombre con gran esperanza. Estar con él da esperanza porque da salidas».
En relación a la nueva Ley de Memoria Histórica que convierte al Valle de los Caídos en un cementerio civil, Osoro ha pedido que sea un lugar «donde recuperar la fraternidad, la reconciliación y la paz». Así ha exhortado a buscar «por todos los medios» que sea un lugar «de reconciliación», mientras ha subrayado la importancia de volver a lo «fundamental».
A este respecto, Omella ha destacado que, si bien es un tema «importante» porque «algunos llevan heridas dentro en el corazón», existen en este momento histórico otras «heridas muy fuertes» por la pandemia del coronavirus. En este sentido, ha hecho un llamamiento a todos los actores políticos y a las fuerzas sociales «como presidente de la Conferencia Episcopal y en nombre de todos los obispos» a la unidad. «Que se unan más todas la fuerzas que tenemos en España», ha instado, mientras que ha reivindicado el diálogo como un instrumento para llegar acuerdos.
Además, ha detallado que el Papa está «muy preocupado» por los datos de la pandemia en España y ha instado a la «unidad» de todas las fuerzas políticas para salir de la crisis. «El Papa conoce perfectamente toda la situación en España. Está muy preocupado por el dolor de toda la gente afectada por la COVID-19 tanto por la salud como por el tema del trabajo que crea tantos problemas de cara al futuro, también por la escuela y el problema con los padres y los niños», ha declarado el responsable de la jerarquía episcopal española.
Omella ha aprovechado la ocasión para hacer un llamamiento a todos los actores políticos y a las fuerzas sociales «como presidente de la Conferencia Episcopal y en nombre de todos los obispos» a la unidad. «Que se unan más todas la fuerzas que tenemos en España», ha instado mientras que ha reivindicado el diálogo como un instrumento para llegar acuerdos.
«Partidos políticos, asociaciones, instituciones civiles, sindicatos, la misma Iglesia. Todos. Hay que trabajar conjuntamente en todos los problemas sobre todo de estos momentos», ha zanjado.