1. Lectura del Evangelio del Domingo 3 ª semana de tiempo ordinario.
Convertíos y creed en el Evangelio
Lectura del santo Evangelio según san Marcos 1, 14-20.
Después de que Juan fue entregado, Jesús se marchó a Galilea a proclamar el Evangelio de Dios; decía:
«Se ha cumplido el tiempo y está cerca el reino de Dios. Convertíos y creed en el Evangelio».
Pasando junto al mar de Galilea, vio a Simón y a Andrés, el hermano de Simón, echando las redes en el mar, pues eran pescadores.
Jesús les dijo:
«Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres».
Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.
Un poco más adelante vio a Santiago, hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca repasando las redes. A continuación los llamó, dejaron a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros y se marcharon en pos de él.
Palabra del Señor.
2. Lectura de la Madre Trinidad
«Te encontrarás a Dios si buscas hacer su voluntad»
Frutos de oración. Capítulo XVIII «El camino luminoso de la voluntad divina», pp 3-6.
1.528. La naturaleza humana de Jesús fue asumida por su persona divina, por lo cual, su voluntad humana quedó tan adherida a la voluntad de Dios, que fue como robada por ésta, haciéndola querer sólo según el pensamiento divino; así fue Jesús, por ser el mismo Hijo de Dios. Nosotros hemos sido creados para participarle y ser hijos en el Hijo; por lo tanto, nuestra voluntad ha de pro- curar unirse a Él, no robada por unión hipostática, sino por adhesión voluntaria ante la contemplación del Bien eterno. (9-1-65)
1.529. La santidad no está en hacer grandes cosas, sino en hacer lo que tenemos que hacer con la máxima perfección, dentro de una gran sencillez, alegría y amor. (13-1-70)
1.530. Busca la voluntad divina y te encontrarás con Dios en luz o en sequedad. Donde está el cumplimiento de sus planes, está el Amor.(12-4-67)