1. Lectura del Evangelio del Domingo VI de Tiempo Ordinario (11 Febrero)
EVANGELIO
La lepra se la quitó y quedó limpio
Lectura del santo Evangelio según San Marcos, Mc 1, 40-45
«Si quieres, puedes limpiarme».
«Quiero: queda limpio».
«No se lo digas a nadie; pero para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés, para que les sirva de testimonio».
2. Lectura de la Madre Trinidad
Opúsculo 13. “La voluntad de Dios» , pp. 22-34
¡Oh excelsitud coeterna del Infinito y Subsistente Ser…! Por tu poderío excelso de majestad soberana, por serte en Ti, por Ti y para Ti la razón de tu coeterna Deidad, eres capaz, no sólo de gozarte en lo que Tú eres, sido y poseído en intercomunicación familiar de vida trinitaria, sino de gozarte también infinita y eternamente, por ser bueno, en hacer felices a otros seres que, creados a tu imagen y semejanza, vivan por participación la misma vida que Tú vives en gozo dichosísimo de disfrute eterno.
Por lo que Dios, que no necesita de nada ni de nadie para ser cuanto es, sido y poseído, disfrutado y saboreado en su acto inmutable de sabiduría amorosa, bajo las lumbreras consustanciales de sus infinitas pupilas; en manifestación amorosa de su voluntad y por el esplendor y para el esplendor de su gloria, en la magnificencia de su infinito poder, mira hacia fuera en voluntad creadora y hace que existan seres que por Él son; lo cual exige correspondencia, en retornación reverente y amorosa, de la criatura racional al Creador; siendo ella también voz en explicación y en retornación de respuesta de toda la creación inanimada