1. Lectura del Evangelio del Domingo
EVANGELIO
Jesús ayuna cuarenta días y es tentado.
Lectura del santo Evangelio según san Mateo 4, 1-11
En aquel tiempo, Jesús fue llevado al desierto por el Espíritu para ser tentado por el diablo. Y después de ayunar cuarenta días con sus cuarenta noches, al fin sintió hambre.
El tentador se le acercó y le dijo:
«Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes».
Pero él le contestó:
«Está escrito: “No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”».
Entonces el diablo lo llevó a la ciudad santa, lo puso en el alero del templo y le dijo:
«Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, porque está escrito: “Ha dado órdenes a sus ángeles acerca de ti y te sostendrán en sus manos, para que tu pie no tropiece con las piedras”».
Jesús le dijo:
«También está escrito: “No tentarás al Señor, tu Dios”».
De nuevo el diablo lo llevó a un monte altísimo y le mostró los reinos del mundo y su gloria, y le dijo:
«Todo esto te daré, si te postras y me adoras».
Entonces le dijo Jesús:
«Vete, Satanás, porque está escrito: “Al Señor, tu Dios, adorarás y a él solo darás culto”».
Entonces lo dejó el diablo, y he aquí que se acercaron los ángeles y lo servían.
Palabra del Señor.
2. Lectura de la Madre Trinidad
«Te encontrarás con Dios si buscas cumplir su Voluntad” , Frutos de oración , pp 3-6
1.528. La naturaleza humana de Jesús fue asumida por su persona divina, por lo cual, su voluntad humana quedó tan adherida a la voluntad de Dios, que fue como robada por ésta, haciéndola querer sólo según el pensamiento divino; así fue Jesús, por ser el mismo Hijo de Dios. Nosotros hemos sido creados para participarle y ser hijos en el Hijo; por lo tanto, nuestra voluntad ha de pro- curar unirse a Él, no robada por unión hipostática, sino por adhesión voluntaria ante la contemplación del Bien eterno. (9-1-65)
1.529. La santidad no está en hacer grandes cosas, sino en hacer lo que tenemos que hacer con la máxima perfección, dentro de una gran sencillez, alegría y amor. (13-1-70)
1.530. Busca la voluntad divina y te encontrarás con Dios en luz o en sequedad. Donde está el cumplimiento de sus planes, está el Amor. (12-4-67)